Actividades de inmunización en un
campo de refugiados.
África Occidental acaba recientemente de controlar un brote de poliomielitis
que afectó a 12 países entre el 2009-2011, causó 281 casos y costó 94 millones
de dólares. Pero la amenaza de un nuevo estallido se ha vuelto a hacer real.
Junto con un grupo de países de África Central y “el cuerno” de África, África
Occidental forma parte de lo que se conoce colectivamente como el
"cinturón de importación de poliovirus”. Desde 2003, más de 60 brotes de
poliomielitis se han producido en esta región, pero este año 2012, la amenaza
de un nuevo brote multinacional se ha multiplicado debido a varios factores
críticos:
En primer lugar, la transmisión de la polio se ha intensificado en el norte
de Nigeria, desde donde históricamente se ha propagado a Níger, Malí y otros países
de África Occidental. En segundo lugar, en toda la región se están produciendo
grandes movimientos poblacionales, debido a la inseguridad en Malí, la crisis
del Sahel y la llegada de la próxima temporada de lluvias - estos movimientos
facilitan el transporte del virus en toda la región. Por último, la escasez de
fondos ha obligado a la cancelación o reducción de las actividades de
inmunización en 24 países de alto riesgo.
La clave para minimizar el riesgo y las consecuencias de un nuevo brote de
polio es aumentar los niveles de inmunidad. Antes de la temporada de lluvias,
entre el 29 de junio al 2 de julio, se llevaron a cabo campañas de vacunación
en las zonas de muy alto riesgo de Níger, Malí, Burkina Faso y Guinea. Al mismo
tiempo, la vacuna oral contra la polio (OPV) se está integrando en otras
actividades de respuesta humanitaria. UNICEF está liderando parte de las
actividades de respuesta integrada en toda la región del Sahel crisis y Malí.
Junto con ACNUR, el Programa Mundial de Alimentos (PMA), otras organizaciones
de las Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales (ONG), las
actividades se centran en aspectos de nutrición, salud (incluida la vacunación,
el tratamiento de la neumonía y las enfermedades diarreicas, así como la
distribución de la redes mosquiteras) y cambios de hábitos (la promoción de la
higiene y el saneamiento, la alimentación del lactante y del niño pequeño,
etc.) Las campañas de inmunización continúan teniendo lugar en los campos de
refugiados de países limítrofes (entre ellos Malí, Mauritania y Burkina Faso) y
en los campamentos de personas desplazadas en el interior de Malí. Además, los
movimientos poblacionales están siendo “mapeados” y se están estableciendo
centros de salud en los cruces claves fronterizos, sitios de reunión y zonas de
difícil acceso.
Sin embargo, estas medidas, las mínimas necesarias, son oportunistas y es
necesario un plan de acción multinacional sincronizado, cuyo mayor factor
limitante ahora mismo es la falta de financiación. La Iniciativa para la
Erradicación Mundial de la Poliomielitis (GPEI) sigue enfrentándose a una
peligrosa brecha de financiación de 945 millones de dólares.
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Reliefweb (en inglés)
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